domingo, 1 de noviembre de 2015

* Fe de erratas, los amigos, y la Gnosis *

***Mientras la mancha solar Nº 2443 sigue peregrinando por el largo camino frente a la Tierra y mientras sigue haciendo parada y descanso, para arrebatarse y laborar, la dejamos ser y charlamos de algunas otras cosas.



Dicen que lo regalado no se reclama, y es cierto, por eso voy a proponerle al amigo Gustavo Castañeda que haga de cuenta, que el cometa regalado hoy aún no llegó y que ni bien lo haga, se lo vamos a adjudicar.
Hago ésta aclaración debido a mi torpeza de hoy al mediodía, torpeza que gracias al amigo Lehaim puedo ahora mencionar y pedir las disculpas del caso.
Ese cometa que vi como*el tercero*, en realidad se trataba del mismo *segundo* que Hunter ya había identificado como SAMIRA.

Ésta torpeza de mi parte es en realidad confusión cuando revisaba LASCO C2 pero en la versión RDF, sin tener en cuenta que Lehaim toma como referencia al normal y conocido LASCO C3, mientras que en C2 la vista del objeto cambia con respecto a la distancia, lo cual dió lugar a mi error, no por culpa de LASCO..jeje, sino de mi falta de atención y mi falta de tiempo para poder corroborar antes, lo cual habla a las claras del serio problema que significa para mí ésta época del año, y que como cada año, la cuestión laboral hasta el 1 de Enero me envuelve en una vorágine indescriptible.

Mil disculpas primero al amigo Gustavo, le prometo que Lehaim va a restituírle su cometa cuando el mismo se haga presente, no tenga dudas que así será, y mil disculpas al Comandante Lehaim por no consultarle y de mi parte la promesa de no intentar tocar la batería en ésta etapa del año, porque evidentemente me cuesta coordinar el pie del pedal del bombo con el pie del pedal del hi hat.

Y además, estimo como probable adicional causa de mi grosero error, la proximidad de mi cumpleaños, lo cual me recuerda que las neuronas no son eternas, menos cuando se me viene encima el año número 52 de habitar éste mundo con éste vehículo modelo 63.

Y citar a Gustavo Castañeda es una de esas reconfortantes cuestiones de hacer éste blog, encontrar a esos amigos desconocidos diseminados por la esfera terrestre que uno nunca imaginó, porque estamos acostumbrados a guiarnos únicamente por nuestro micromundo como referente, siendo que nuestra pequeña realidad es local y debemos comprender que ni estamos solos en el micromundo ni en el macro.

Ésta es una buena reflexión de lo que internet y su virtualidad nos deja como positivo, no imaginamos lo que no conocemos, lo cual no implica que no exista, y así como desconocemos seres con afinidades, han de existir más allá de ésta gran esfera otros..., compañeros desconocidos pero existentes que desde algún lugar allende la atmósfera nos sienten en afines sentimientos y misiones.

La generosidad de Gustavo es destacable, se ha tomado el trabajo de subir a la red 5 imágenes correspondientes al libro de otro gran experto en Gnosis, hablo de Stephan Hoeller y su libro Jung El Gnostico, donde Hoeller analiza el trabajo de otro capo en éstas lides, Carl Gustav Jung.
En su libro, Hoeller saca 8 conclusiones que podemos leer en éstas imágenes que envió Gustavo;











Por razones de administración y economía de espacio he reducido el tamaño de las imágenes, pero pueden descargarlas en alta calidad a través de los siguientes links que generosamente Gustavo nos ha compartido;

-Página 76
-Página 78
-Página 80
-Página 82
-Página 84

Qué maravilloso ésto de la Gnosis, es algo tan pero tan grande y profundo que a pesar de tanta explicación detallada, el Ser se *descentra* de lo escencial, quita la mirada del objetivo y vuelve a mirar donde sólo hay preguntas sin respuesta.
No ha de ser difícil, creo, entender que nadie mueve un dedo o un músculo ni se pone a pensar en algo que no implica preocupación.
Un elefante no se preocupa por una hormiga, un hombre de 40 años no teme trabarse en lucha con un niño de 3 años, así como el Sol no se preocupa por un cometa suicida.

Si los seres humanos somos bombardeados constantemente con numerosos artilugios para mantenernos en la ignorancia, algo en nosotros es motivo de preocupación como para que seres poderosos deban desvivirse por criaturas tan *supuestamente inferiores* como nosotros.
Y no hablo únicamente de Seres invisibles, sino de pares de carne y hueso, tal como ocurre en el mundo de los mortales.

Cuando se conocen aquellas Revelaciones, la duda se extingue y Conocer es nada más y nada menos que abandonar el miedo a creernos inferiores, para empoderar esa parte que a tantos seres materiales como inmateriales, les quita el sueño.
El problema más grande que enfrentamos es que estamos sedientos y cuando por fin hallamos un oasis, en lugar de arremeter para beber, nos quedamos mirando qué es el oasis..Y mientras divagamos sentados en la caliente arena, el tiempo pasa, y el oasis se transforma en un espejismo. Tarde ya, decidimos ir a beber y no hay agua.

Una de las grandes programaciones mentales para nosotros, es jugar con nuestra sed y para ello la oferta de agua virtual es enorme.
A veces me pregunto cuán complicado habrá de ser poner a prueba algo en lugar de cuestionarlo, cuando el órden indica que para cuestionar algo primero hay ponerlo a prueba. Ahora bien, si se pone algo a prueba y resulta convincente sigo preguntándome porqué en lugar de explotar lo que resulta, nos ponemos a ser los peores conspiradores de nosotros mismos.

He allí la atadura a un sino que demuestra cómo el bombardeo de opciones y nuestra avidez por todo, hace que dejemos de lado lo útil hallado, para seguir distrayéndonos en lo inútil. Y claro, quien no ha hallado respuestas cuestionará al que sí las tiene aduciendo que cada quien hace su propia búsqueda, y para quien algo es convincente, para otro no lo es, y ahí, el que tiene respuestas es tentado a pensar que si ya las tiene para qué se va a preocupar por los que no las tienen, y pensar así es el nacimiento del individualismo egoísta que si no se combate internamente, sería por ejemplo la no existencia de seres tan generosos como Jung, Jonas o Hoeller.

Debo decir con total sinceridad que si me estoy muriendo de sed y hay un vaso con agua no voy a detenerme poniéndome a analizar mentalmente cuántos componentes tiene, o qué peso atómico los elementos que la componen, tampoco dejaré el vaso allí mientras muero de sed y necesito convencerme de que la necesito leyendo los manuales Santillana que me explicarán qué es el agua.

Sí, debo saber qué es el agua para diferenciarla del veneno, pero si aún sabiendo que es agua no la bebo... y debo invertir mi tiempo en entender que su densidad es de 999,97 kg. por metro cúbico o que su masa molar es de 18,01528 gramos por mol...lo más probable es que me pase la vida distrayendo el objetivo y me muera de sed.
En fin..., que la contribución que le han hecho a la humanidad los Jonas, los Hoeller o los Jung, es el vaso de agua que a muchos, nos calma la sed.
Benditos sean los que encuentran el agua y ya no la buscan para sí, sino que han aprendido a compartirla.

Gilgamesh***

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