sábado, 2 de mayo de 2015

* Gnosis aplicada-siglo 21 *

***Hacía tiempo que no iba a internarme en la jungla de cemento del centro de mi ciudad.
De vez en cuando es un ejercicio necesario para no perder la visión completa de una realidad conjunta.
Desde el piso 6 donde me encontraba miraba por la ventana a un edificio en construcción en la vereda de enfrente.
Cuatro operarios de la construcción preparando encofrados, pero dos de ellos hablando por celular..
Fué una imágen tan contundente que, si me quedaba alguna duda, pues ya no.

Miré hacia abajo, la cantidad de gente yendo de aquí para allá como si fuera un hormiguero desorganizado, y la mayoría..hablando con el portátil aparatejo.
Gente muy nerviosa, el tránsito alocado, conductores gritándose cosas por cuestiones viales, autos y más autos.
La actividad económica a pleno, los negocios abarrotados y un motor invisible activo, el de la masa consumidora.



Hablamos de Capitalismo, los hay de distinta índole. El Capitalismo en éste país intenta ser más benévolo desde el Gobierno actual, sin embargo no deja de ser Capitalismo. En los países donde gobiernan las derechas el capitalismo es de máxima exclusión, impiadoso, autoritario, censor, represivo.
Donde el Capitalismo intenta ser más light, se forma una especie de híbrido, una mezcla de Capitalismo igualitario. Cuando el Capitalismo duro beneficia pura y exclusivamente a las clases sociales altas, los beneficios son para unos pocos, es altamente probable que las clases bajas no sepan jamás lo que es ir a un club, no vacacionen, haya menos tráfico porque menos, pueden tener coche o motocicletas, las ventas caen por la falta de consumo, los comercios más grandes se comen a los más pequeños, la pequeña y mediana empresa quiebra, incluso hay más inseguridad, pero no se nota porque hay garrote estatal y matar a un ladrón se vuelve un aplauso y una condecoración. La gente baja de nivel, si antes tenía poco ya no tiene nada, obviamente hablando en un aspecto adquisitivo material.



El Capitalismo light por su parte, sigue favoreciendo a las clases altas pero les quita un poco más que antes y lo reparte a las clases más bajas.
El sistema se sostiene por el consumo, ya que ahora los que estaban abajo pueden tener su coche, su motocicleta, vacacionar y consumir.
Algunas personas que estaban abajo y suben un poco no se sienten ya satisfechas y quieren seguir subiendo, ante lo cual se provoca una especie de competencia entre las clases bajas a ver quién logró ascender, mientras que las clases altas no soportan ver el ascenso de la señora que le limpiaba la casa, o el señor que les cortaba el césped del jardín. 

Esa clase alta no quiere ver a la clase baja progresar y es que la necesita abajo porque sino ¿quién hace el trabajo sucio?.
Los trabajadores tienen sus gremios que les defienden, los salarios se elevan, hay inflación y los precios suben, pero suben los salarios por la fuerza gremial y las leyes de protección laboral, no suben porque *la patronal pague con gusto*, son los primeros en quejarse cuando un trabajador les da el presupuesto por un trabajo o el porcentaje de adecuación a la inflación.



En ese panorama, finalmente todos consumen, no es casual que las calles queden chicas ante el incremento del parque automotor, no es que la tasa de natalidad aumentó, no, aumentó el consumo porque antes los de abajo no consumían y ahora sí que consumen. Le molesta a la clase alta =por ejemplo=cuando vacaciona y ve que las playas se han llenado de...*gente baja* y es normal, ese no es el país que ellos quieren...Hay una generación aquí, que nació en Democracia, y que no ha padecido asoladas militares ni gobiernos de facto, ni convulsiones civiles, ni sabe lo que fué el neoliberalismo voraz de los 90, ni el caos que a muchos nos tocó vivir..

Cuando no se tiene experiencia de haber vivido bajo esas condiciones todo lo que hoy tienen les parece normal, y hasta poco...diría, gran razón para que se vuelvan entonces más exigentes. Eso no está mal, al contrario, la ciudadanía debe exigir más eficiencia a los gobernantes. Si más gente consume más gente entretenida en trabajar y ganar para comprar y comprar, pero sigue existiendo una capa baja que siempre estuvo en el abajo de los abajos. Ellos son atendidos por el Estado y se les asiste con planes sociales y ayudas para que pasen el mal momento y tengan oportunidades de progresar, pero el progreso de quienes no han tenido absolutamente nada no es de efecto inmediato.



En esa larga espera de inversión de tiempo, miran hacia arriba y ven lo que la clase inmediata tiene y ellos no, saben que para lograr ese ascenso no alcanzará con lo poco que tienen, gran razón para tentarse a delinquir, bombardeados por el consumismo fomentado desde los medios de comunicación y por la postal consumista que ven a diario en las calles. Más inseguridad se provoca, incluso dentro de las clases altas la tentación a corromperse es mayor ya que si antes se hacía negocio sólo con los ricos ahora se hace también con los pobres que han ascendido un escalón, pueden comprar lo que ellos tienen para vender, por ejemplo, los estupefacientes, el alcohol, el sexo rentado, etc.
Sólo consume quien tiene dinero para pagar o quien delinque para poder consumir, incluso el delito parece formar parte del negocio capitalista ya que, ¿casualmente? crecen las agencias de seguridad, lo comercios de venta de armas y alarmas, de perros bravos, de vigiladores particulares, y los herreros.. de parabienes instalando rejas por doquier.



Casualidad también...no parece ser que los policías exonerados por corrupción, se dediquen en el destierro ¿a qué? a formar agencias privadas de seguridad, gran combo que cierra a la perfección. Cuando los jueces y los abogados desvían la noble tarea de hacer justicia privilegiando el sucio dinero, las leyes suelen favorecer a los que pueden pagar por seguir delinquiendo desde abajo, o robando con guante blanco desde arriba.
Conclusión, cualquier forma de gobierno es inútil cuando realmente pensamos en un estado de gracia colectiva.
¿Se entiende?, es que el problema somos todos, ya que los sistemas de gobierno nos son implementados por marcianos o extraterrestres provenientes de Ganímedes, salen de nosotros mismos. No hay líder ni sistema que garantice un estado de bienestar absoluto, porque para conformar a todos implica igualdad y lamentablemente la igualdad no se tolera por quienes quieren y necesitan estar siempre por encima del resto. La génesis de todo ésto pone perfectamente de manifiesto la Verdad de la Gnosis, porque al fin y al cabo no se puede esperar frutos nobles de un árbol podrido y la podredumbre está hábilmente instalada en nuestro adn.



Por eso no habrá paraíso en la Tierra, excepto que un grupo extermine al resto, y aún así, es altamente probable que ese grupo termine conspirando puertas adentro por asumir el control , tal como nos lo muestra la historia, donde los crímenes palaciegos dentro de la nobleza eran moneda corriente.
¿Cómo no va a ser aburrida la Gnosis?, no te dá ninguna promesa, ningún apocalipsis, no hay atajos más que adecuarte a convivir dentro de ésta burbuja perversa.
Y si creés en que luego de ésta vida hay otra mejor, tenés que prepararte, y prepararte no es fácil..., no lo es digo, para la gran mayoría, que no está dispuesta a dejar de consumir, a dejar de *pertenecer* a un estrato superior a como de lugar. 

Difícil es la Gnosis porque no contagia lo que nadie quiere hacer, y obviamente que una doctrina tan aburrida y difícil de asumir tiende a fracasar. 
Pero la Gnosis fracasa vista desde lo colectivo, y no desde lo inividual, ya que aquellos que logran asimilarla, dejan de padecer de todo lo que éste mundo les hace padecer. Sufriremos más o menos dentro del Capitalismo, del Comunismo, del Liberalismo, desde la Monarquía, desde los gobiernos dictatoriales o democráticos, sufriremos al fin porque cualquier sistema es imperfecto como quienes los gestamos o llevamos a cabo.



La religión tradicional que a todos nos han enseñado es droga para el Espíritu, al menos lo adormece y le promete cosas que no se van a cumplir, es más entretenido y aunque no creamos demasiado por lo menos hace de ésta vida algo más adrenalínico. La Gnosis en cambio, exige abandonar lo material y parece que ese es nuestro gran talón de Aquiles, lo que hace de la Gnosis un remedio amargo para gargantas acostumbradas a lo dulce.
Creo que éstos tiempos son peores que los de la inquisición, el Gnóstico huía y su peor terror era la hoguera, hoy nadie nos persigue para asarnos vivos, pero debemos luchar contra un contrincante invisible o peor aún...que está en todos lados, el consumismo ha atravesado todas las capas sociales, todas las ideologías y vertientes filosóficas. Difícilmente alguien pueda ser Gnóstico si tiene que tener tarjetas de crédito, de débito, cobrar por cajero automático y trabajar 12 horas para ganar lo que luego se transforma en consumir. Cuando la felicidad se construye sólo en el dinero antes que en el amor, confundimos amor con compraventa, y cuando el amor tiene precio, fenece como todo negocio de dos partes cuando una de las dos, ya no se siente redituada.



Felicidades temporales son la norma, y felicidades permanentes son siempre desilusión cuando uno no ha entendido cómo funciona ésto de vivir.
Si uno nace con una pierna menos deberá aceptar que la vida no será como para el resto, que dispone de las dos, a partir de allí hay que lidiar con la falencia, o se derrumba y se muere o se supera y sale adelante, pero es imposible superarse en éste mundo si no lo entendemos, entenderlo es asumir la falla que traemos, no por pecado alguno sino por defecto de orígen y eso es lo que se intenta disimular, no asumir que llevamos un gen difícil de domesticar.

Aplicar la Gnosis en éste tiempo es difícil pero no imposible, en el primer mundo o en el quinto, en todos, el gen perverso sale a flote, pero también disponemos del Conocimiento para eso, precisamente, conocer primero en qué cosa estamos inmersos y tratar de no hundirnos en ésta cruda realidad.
Recetas...., todos piden recetas probadas de gran efectividad pero cuando se da la Gnosis...es como la cucharada de leche de magnesia...
Hete allí que la sustituímos por algo más entretenido, la gente paga para que le den recetas fáciles que suelen ser eficaces en el corto plazo, pero que luego terminan en la ineficacia absoluta.



Compraremos piedras energizadas, consumiremos Flores de Bach, haremos interesantes cursos de autoayuda, iremos a buscar energía a los santuarios, invocaremos a seres que sólo ve el que los vende, pero todo y absolutamente todo..serán parches.
Ser feliz no depende del dinero ni de nada que no sea asumir dónde estamos parados, como primera medida, la vara de nuestras ambiciones será lo que nos produzca más o menos insatisfacción, y ojo que las ambiciones no siempre tienen que ver con el dinero, muchas veces tienen que ver sobre lo que pretendemos de los demás, específicamente cuando no son como nosotros queremos que sean. 

Dichosos quienes aman aunque no se sientan amados, ya no necesitan del otro, se autoabastecen amando, y esperar deja de ser una vara que siempre se estará subiendo un poco más. La única forma de no poder amar queriendo amar, sería que no hubiera otro a quien amar, pero eso sería la soledad absoluta, y es un imposible ya que gente para amar...sobra. El único momento en el cual no hay nadie material o físico para amar es cuando dejamos de existir en ésta realidad, seguramente que allí debemos tomar pura consciencia de que estamos solos con nuestro Espíritu, y que él es nuestra única compañía, yo creo que en ese mano a mano, habrán de llegar los reclamos del Espíritu, ¿me amaste?, ¿me escuchaste?, y será allí cuando habremos de reconocer que hemos amado a cualquier cosa menos a nuestra escencia.



La vida real lamentablemente está ahí, cuando cruzamos el umbral de la puerta de nuestra casa. El mundo es cruel y lo sabemos, si entendemos porqué lo es y cómo funciona, la Gnosis no sólo es un camino para dejar gobernar al Espíritu en cuestiones inmateriales, sino que también es la clave para que ese mundo material cruel no nos amargue ésta corta estadía. ¿Aplicar la Gnosis es entregarse al dolor y a sufrimiento? ¡noo!.
Es la inteligencia de no permitir que el sufrimiento nos vuelva inútiles, para nosotros mismos y para el entorno mismo.

El enemigo a vencer es poderoso, escapa a nuestras posibilidades, a veces se instala dentro de nosotros y nos destroza, por ahí pasa la cuestión, anular al residente primero, y luego contrarrestarlo en el afuera, es decir en el mundo dentro del cual existimos, familiar, social, global.
¿Hay que ser indigente para ser Gnóstico en el siglo 21?, ¡no!.
Si alguien cree que renuncia a lo material yéndose a vivir a una isla desolada o a un coto cerrado, se equivoca.
No hay escape de éste mundo, hay que gambetear a lo Messi, hábilmente esquivar las cosas malas, eludirles, ¡oooleeee! diríamos en el estadio.



Solemos valorar lo que tenemos cuando ya lo hemos perdido, quisiéramos entonces *retroceder el tiempo* pero no se puede.
Clic mental entonces, aprender a quitar de nosotros la ceguera que no nos permite ver los valores y las herramientas con que disponemos, las personas bellas que conocemos, lo poco o mucho que interpretemos tener. Si sólo vemos lo malo y lo negativo lo potenciamos, ¿no es una buena razón para ELEGIR potenciar lo bueno?.

Quiten de su mente sus defectos, potencien sus virtudes, y por favor...no digan que no tienen ninguna ¡todos tenemos aunque sea una!, pero son varias.
Debemos ser sumamente críticos con nosotros mismos, tener la capacidad de reconocer las cosas malas que tenemos no para torturarnos sino para detectarlas y ERRADICARLAS. SUSTITUÍRLAS por las buenas y potenciar a éstas últimas.
No hay nadie en éste mundo que pueda arrojar la primera piedra, por ende, no somos ni mejores ni peores que nadie, lo mejor que podamos tener debe ser una bendita herramienta para nuestro progreso y para aportarlo a los demás.



Nadie se salva solo, vivimos en comunidad, siempre vamos a necesitar *algo*, de *alguien*, y si necesitar es un mal negocio pues hay que tomar, pero mucho más dar, para que el usufructo sea justo para ambas partes, nadie vivirá en la gracia si sólo toma, o si sólo dá. El altruísmo no es *sacrificio*, los sacrificios son el placer de los dioses, dioses que de ninguna manera desean que dejemos de hacer sacrificios...porque se alimentan de ellos, es decir...de nosotros.
Grandes pensadores que llegaron a entender la Gnosis pasaron por un período de insoportable aceptación, a punto tal que terminaron quitándose la vida.

No es esa la manera, aunque la vida de cada quién es patrimonio de cada quién, la Gnosis revela como un terrible cachetazo el porqué de los porqués, no para autoeliminarnos sino para hacer escuela en un mundo hostil, que aunque nos resulte insoportable, ¡es el trampolín para vencerlo y ser libres!.
Éste sistema nos quiere muertos en vida, de brazos caídos, entregados, y su necesidad de someternos es tan grande que no se conforma con que moriremos indefectiblemente un día, nos quiere infelices en vida, zoombies, y más fácilmente quitarnos nuestro poder al cual tanto le temen.



El sistema no le teme demasiado a las revueltas, ya sabe cómo se superan y se sofocan, teme a que le cortemos el hilo con el cual manejan nuestras vidas internas, porque allí es nuestro templo indestructible sobre el cual no tienen absolutamente ningún poder, en la medida que no seamos nosotros mismos quienes dejemos la puerta sin llave...
No buscar la perfección es ahorrarse disgustos, lo cual no implica aceptar todo como está, no, no, no.
Es la pasividad la que agrada al sistema, en cambio la actividad les complica, nuestra actividad significa siempre *hacer* para depurar, no importa si tapamos un agujero y se abre otro, no importa lo que digan las noticias porque siempre intentarán hacernos creer que todo es inútil, en realidad es inútil derrotar colectivamente, pero sí individualmente, y si lo exteriorizamos estaremos contagiando a depurar, haremos grandes zancadillas y ya no una sola individualmente. Seguramente vamos a mejorar, aunque no a solucionar, y aunque parezca poco mejorar, es mucho en un mundo fabricado para impedir.



Y lo más importante es que haciendo, depurando lo que podamos, estamos haciendo gimnasia, como dije una vez.
El músculo la necesita, el organismo se beneficia, ¿cuánto más se beneficia y fortifica un Espíritu que *hace*?, porque haciendo se rebela, le hace difícil la tarea al mal, le *grita*; *ojo....aquí estoy yo y no me entrego*.
Y como el músculo y la gimnasia, el Espíritu que no se entrega y se rebela justamente donde está prisionero y está en desventaja, se ejercita para cuando deba salir de aquí. No tengo dudas que al salir, quienes nos enfrenten esperando que bajemos la cabeza =si la tenemos= no serán capaces ellos...de soportar nuestra mirada.
No existe el guerrero espiritual, el Espíritu no hace la guerra, usa su poder natural para prevalecer, el más poderoso e inteligente componente de toda la Creación.



Gilgamesh***

* Actualización solar y del clima espacial *

***Excelente Sábado para todos

Vamos a ponernos al día con la actividad solar y del clima espacial.
El Sol debía hacer algo y lo está haciendo en una de las posibilidades esperadas, en farside.
Todo comienza en el día de ayer, como para desmentir que el Sol se había tomado el día feriado, y vaya si trabajó.
Tremebundo bombazo en farside que generó un halo completo;



Éstos halos cuando son completos son de temer, porque si se han producido desde los bordes o cercanos a los mismos pueden tener algún componente geoefectivo, sin embargo éste se *habría* producido en la parte trasera por lo tanto se descarta geoinfluencia.

Dejamos el halo de ayer y vemos lo que ha estado ocurriendo hoy, también en farside.
Primero una erupción al inicio de ésta jornada, luego alrededor de las 09 UT dos bombas solares no muy potentes simultáneas, desde los bordes;





Con éstos eventos el Sol se ha asegurado bajar un poco a los neutrones;





Lo bien que hizo.. porque estábamos observando que entrábamos en un período complicado, por ejemplo ayer, un pico coincidente con la caída de nuestro campo magnético y zas...;



Espiamos ahora cómo se ve Febo y algunos chispazos en los bordes;





Manchas solares numeradas y sin numerar;



Bien, NOAA ha declarado como plage a la mancha 2334, sin embargo yo no la doy por extinta ya que sigue visible, es por eso que no hay datos actuales sobre la misma.
2335 parece estar creciendo, mientras que por el borde Oeste apenas por encima del ecuador está ingresando una mancha o región que hay que esperar a que se haga completamente visible.
Pocas son las esperanzas de erupciones con éste panorama, aunque al ser Beta Gama la mancha 2335, podríamos ponerle alguna ficha.
Los agujeros coronales Norte y Centro son también promesa de soplar algunos vientos;



Viento solar que ha mejorado llegando a los 500 Kms. x seg;



Filamentos;



Así están las cosas, a tal punto que Spaceweather publicaba hace un par de días lo siguiente;



Y es cierto, NASA se aferra a su pésima interpretación de un ciclo solar que no fué, y le queda como mínima esperanza esperar las manchas que les citara el otro día, las que vienen en farside, sin embargo ya se están aventurando a aceptar que un Sol a cara lavada es sinónimo de un ciclo fenecido o en vías de cierre.

Y es que el Sol amaga a cada rato pero no se define, al ver las actualizaciones del reacomodamiento de sus polos magnéticos, confirmamos el curso normal del Polo Sur que no duda, se zambulle hacia el Sur, pero el Norte, ese polo enigmático que no termina de definirse parecía encaminarse por fin a trepar a su Norte, pero en los últimos registros nuevamente ha caído;





Realmente es una caja de pandora, los indicios son de un Sol que se irá a dormir como en cada ciclo de baja, pero ese polo deja abierta una puerta a períodos quizás furiosos aislados de actividad solar, por eso el ciclo a mi criterio, aún no está cerrado tal como estamos acostumbrados a ver un ciclo definitivamente terminado.

¿Qué pasará con el Sol?...ahhhh..muy fácil la respuesta;
Qui lo sá..

Gilgamesh***

viernes, 1 de mayo de 2015

* El Místico *

***Excelente primera noche de Mayo para todos.

Aprovechando la quietud informativa que nos suele convocar, les comparto algunas nociones que ayuden a profundizar en la Gnosis.

Suele sorprendernos un hombre sencillo que nunca ha leído un libro y que, sin embargo, puede resolver los problemas más difíciles de la ciencia mejor que los científicos famosos. Hay gente humilde sin titulación académica ni experiencia intelectual para quien el cielo es tan accesible que los enfermos son sanados a petición y el malo siente en su corazón la fusión de la bondad amorosa al contactarlo.
Juana de Arco nunca había leído un tratado de estrategia ni visto un campo de batalla pero derrotó en su primer intento a los más grandes estrategas de su tiempo. 

¿Cómo puede ser esto? Es muy sencillo: porque ella se entregó por completo a la Voluntad Divina y no cuestionó lo invisible como lo habría hecho un adepto del plano intelectual.
Muchos podrán notar la manera de desconcierto y de pregunta en que los críticos ven a éstas criaturas que están animadas por la luz viviente del Padre y generalmente los tildan de *místicos*. Ellos =los adeptos del plano intelectual= no pueden entender, porque tratan de medir facultades universales con las capacidades limitadas de sus cerebros. Porque no lo pueden entender, los críticos insultan al místico y lo tratan con desprecio, mientras que el místico reza por su inquisidor y continúa con su labor de amor.



El camino del desarrollo espiritual es simple y directo: *Vive siempre para los demás y nunca para tí mismo*; *Haz a los demás lo que te gustaría que te hagan*; *No hables o pienses mal de los ausentes*; *Haz lo que es difícil antes de hacer lo que te es fácil*. Éstas son algunas de las fórmulas de la forma mística que conduce a la humildad.
Hay una forma de purificación física que hoy va al corazón del adepto del plano intelectual, por ejemplo el vegetarianismo, que disminuye el atractivo por el consumo de carnes. Pero ésta purificación no significa nada si cuando se purga el cuerpo de la influencia de los animales, no nos purgamos el cuerpo astral del egoísmo y el espíritu de la influencia de la vanidad, y ésto es cien veces más perjudicial que los impulsos nacidos de comer carne. 

Cuando un hombre cree que sabe algo y se pone a la par con los dioses, trabajando para lograr su salvación personal y se encierra en una torre de marfil con el fin de purificarse, ¿para qué se le habría dado algo así?. 
Él piensa que tiene lo que necesita y se ve a sí mismo como una persona que sabe todo lo puro y perfecto que es. Pero cuando un hombre es simple y consciente de su debilidad, y sabe que su voluntad es de poca importancia si no se ajusta a las acciones del Padre Celestial puede no estar preocupado por su pureza personal ni por sus necesidades, pero sí estar comprometido con el sufrimiento de los demás, entonces los cielos le reconocen como uno de sus hijos y Cristo pide que sea llevado hacia él para abrir las puertas del Conocimiento.



Una madre que ha trabajado toda la vida para concientizar no sólo a sus hijos, sino también a los de las personas más pobres que ella, es mayor ante el Eterno que el teólogo pedante y el llamado adepto tan orgulloso de su pureza. Esta es una verdad instintiva que define a las personas sin necesidad de demostración, ya que es una verdad que se aplica a todos los niveles.
Por lo tanto, es menester hacer comprender a los demás que hay que apuntar a la sencillez en lugar de la pedantería y esa, dejarla para los hombres que se creen tan perfectos, porque caerán tan estrepitosamente como la altura de su pedantería.
El camino místico requiere la ayuda de éste modelo en todas las etapas de la evolución y de la percepción. 

En el plano físico, es bienvenida la ayuda de amigos y maestros que enseñan con el ejemplo; en el plano astral, la ayuda de los pensamientos de devoción y de la caridad que ilumina el camino y permite poner en práctica los ensayos a través de la paz del corazón; por último, en el plano espiritual, la ayuda de los espíritus guardianes fortalecidos por sentimientos de compasión hacia todos nuestros hermanos equivocados y de indulgencia hacia todas las debilidades humanas, así como el orar por todos los ciegos intencionalmente cegados y por todos quienes deciden ser nuestros enemigos. Entonces es, que la sombra terrestre desaparece lentamente, que el velo es levantado por un momento y que el sentimiento divino de saber que nuestros pensamientos y sentimientos nobles son escuchados, llenan el corazón con valentía y amor.



Después de haber llegado a ese punto, el místico no siente más la necesidad de ir hacia las llamadas sociedades adquiridas, incluso para los que se dedican al ocultismo, ni de libros para las masas, innecesarios para explicar cosas tan simples. Él no se fía de las sociedades y los libros y se retira cada vez más en comunión con el Espíritu. Él actúa y no lee más, él ora, perdona y tiene el tiempo ya no para juzgar y criticar, sino para ponerse al servicio de la causa noble.
El intelectual, observando a un hombre así, se pregunta en primer lugar a través de qué libros el místico ha alcanzado esa etapa, también a qué tradición pertenece y, por último, al no poder soportarlo, en qué categoría debería colocarlo con el fin de mejorar su juzgamiento...

Él busca la palabra *magia* como algo deshonroso , el místico la utiliza para curar a voluntad, por la forma del análisis y el conocimiento le permitirá influir en la mente de los demás para ayudarlos, incluso a una distancia remota, y nunca para el egoísta objetivo que está detrás de todo. 
Y como el intelectual no encuentra en los libros una respuesta a estas preguntas, lo que necesita es una explicación para recuperar su tranquilidad, se dice a sí mismo gravemente o en el círculo de sus admiradores; *Posesión* o *herejía*, así el intelectual se convierte en un poco más vano y el místico, un poco más humilde.



Y mientras que estudiar, leer, parece ser necesario para progresar en el plano intelectual, no se necesita nada de eso para progresar en el camino místico. La razón es que la puerta no se abre por el solicitante sino por sus guías invisibles y por el estrés de su ser espiritual.
Por lo tanto, no hay nada más fácil y nada más duro que seguir este camino. 
Está abierto a todos los hombres de buena voluntad y ningún otro hombre fuera de la humildad es digno de él. La puerta de entrada es tan baja que sólo los niños pequeños pueden entrar. 

Como los que vienen a la puerta son a menudo los hombres altos y orgullosos, piensan que esa puerta está por debajo de su dignidad como para tener que agacharse o convertirse en pequeños, por eso la entrada se mantiene durante mucho tiempo invisible para ellos.
Muchos traen la Gnosis en ellos sin saber qué es, cuando lo saben descubren un maravilloso tesoro que estaba oculto, tesoro que se multiplica en los demás cuando se sabe compartir, no se regala ni se dona, se muestra, se enseña a conocer y así se comparte en un efecto multiplicador que transforma al ser, al entorno, y a la búsqueda de un mundo menos cruel.



El místico no nos pide nada, no nos cobra nada, no se hace besar el anillo ni la túnica, está cuando lo necesitamos aunque no lo llamemos, sabe respetar nuestros silencios y no quiere apegarse a nosotros porque ni él debe depender de nosotros ni nosotros de él, no convoca, está. No invade, fluye y de su fluir se sirven quienes pueden tomar de él sin pedir permiso. Seremos místicos todos en la medida que comprendamos el acto de dar, de ser solidarios sin que haya hacer un esfuerzo, nace naturalmente como el deseo de Sofía, de reparar y repararse de su propio error, o de su vocación de transformarse en Tierra para brindarnos su riqueza.

Y su consorte, el mismo que nos enseñara a ser místicos como lo hizo con sus apóstoles, *doy, enseño y me voy*, y se fué lo físico para quedarse en lo espiritual, garantía de estar presente por siempre con nosotros.
El místico, algo muy distinto de lo que generalmente se piensa.



Gilgamesh***

* Día del Trabajador... *

***Muy feliz día de los trabajadores para quienes lo tengan.

¿Qué decir en éste día?, ufff..tanto.
Siempre entendí y sostuve los postulados sobre el trabajo como que *es un derecho* o que el trabajo *dignifica*.
Y es muy cierto hasta que uno llega a la Gnosis...ahí, la mirada cobra otro ángulo.
¿Porqué debemos trabajar?, pues parece que es un *decreto* emitido por la autoridad, allá en tiempos de Adán y Eva...
Siempre he intentado situarme en aquellos tiempos donde la cantidad de habitantes no era ni por las tapas...como la de ahora, no existía la abrumadora tecnología actual, y en realidad trabajar era únicamente para comer y vivir. 
Sembrar, cosechar, criar animales para devorarlos y punto.
Después, se fueron descubriendo formas de transformar la materia, *la rueda*, *transportes*, *armas*.
Y se crearon los *oficios* para producir cosas.



Imagino que con la materia transformada en vigas de madera, ladrillos, mobiliarios, etc., el oficio inició la era humana del trabajo horario.
Luego los servicios, como la gente que limpiaba, que atendía a una clase superior, los maestros, el sexo, los artistas, los soldados..
Pienso en que la evolución tecnológica, que suponía una mejora para el hombre, terminó siendo su ruina.
Ruina en el sentido de trocar el tiempo en trabajo, trabajo para *ganar* dinero, y dinero para comprar cosas u obtener servicios.
Veinticuatro horas tiene el día, de las cuales al menos 7 u 8 son para dormir, 8 para trabajar y las 8 restantes para disfrutar de lo que supuestamente hemos ganado fruto del trabajo. 
Lamentablemente ese tercio es una mentira. 
Gran parte de la humanidad inicia la jornada en una media desde las 8 de la mañana, regresa a su casa a las 4 de la tarde, difícilmente goce de las 8 horas de descanso y recreación hasta las 12 de la noche...
A esas 8 horas destinadas al disfrute algo se las come..., el estrés laboral, los problemas de la vida cotidiana, los hijos, la pareja.



Poco tiempo para invertir en disfrute lo que tanto cuesta ganar, sin tiempo el único tiempo es dentro del hogar. Y entonces intentamos trasladar el mundo exterior al hogar, la televisión nos hace creer que tenemos al mundo en casa, ahora internet, el móvil, la play, etc.
Un día decidimos tomarnos las tan ansiadas vacaciones y lamentablemente apenas duran una, dos o con suerte tres semanas de todo un duro año.

Y bueno...si el trabajo dignifica, lo hará para saber que contamos con el dinero necesario para consumir, pero difícilmente para vivir como quisiéramos.
Para agravar aún más éste aciago panorama, el sistema se volvió tan perverso que mucha gente ni siquiera puede tener su trabajo. 
Allí el mismo sistema nos demuestra que el trabajo dignifica aunque sea esclavo y chupasangre, ya que peor la pasa quien no lo tiene, abandonado a ...tantas carencias. 
Pensamos entonces, nivelando siempre hacia abajo, las desgracias ajenas nos hacen sentirnos agradecidos de lo que *tenemos*.
Sea o no capitalista, cualquier sistema se basa en el trabajo, capitalismos duros, capitalismos suaves, pero el que no trabaja...se queda afuera..



Podemos ser inteligentes y negarnos a consumir todo lo que el sistema nos propone, pero es difícil sentirse *no pertenecer*, especialmente cuando la regla es *mostrar* lo que uno tiene, y ésto se juega en los massmedia, la ropa, los coches, el estilo de vida, la tecnología, en fin..., nos tientan a punto tal que el que no consume lo que hay que tener...también se siente *afuera de*. 
El dinero no alcanza, pareciera que cada vez hay que tener más, pero el día tiene 24 horas...
¿cuánto más vamos a trabajar?, 
¿cuánto es lo que en realidad necesitamos ganar?..

En mi caso, que es el de muchas personas, al trabajar de forma autónoma puedo quizás administrar mi tiempo de una manera más favorable y es lindo trabajar de lo que a uno le gusta pero aún así, debo trabajar como cualquier mortal. Se alquile o se posea una propiedad, la casa es una entidad viva que nos exige mantenerla, los *impuestos* por más injustos que parezcan hay que pagarlos,y se llevan muchas horas de nuestro trabajo. 

Ni hablar de quienes agregan entidades vivas que siguen tragando dinero...je..., el club, el servicio de TV por cable, internet, los teléfonos, el coche, los servicios médicos prepagos, los seguros de vida, las tarjetas de crédito, las compras en cuotas y la lista puede ser tan grande como grande es el techo de nuestro consumo. 
Y si hay niños... bueno..., ellos también crean entidades vivas que se comen más, los salarios o sueldos.



¿Será tan digno el trabajo?, ¿o esa calificación forma parte de un lavado de cerebro para que no paremos nunca de trabajar?
Un ser para el cual el trabajo lo es todo, alimenta dos bocas, una es la del empleador que generalmente le paga como salario una milésima parte de sus pingues ganancias, otra, es el sistema que se traga el poco dinero que el asalariado gana. 
No veo que así sea digno el trabajo, excepto para quienes fomentan semejante sistema de esclavitud. 

Cuando uno ha arrancado desde abajo y ha conocido lo que es no tener trabajo o ganar muy poco, pero aún así ha logrado mejoras, fruto de la suerte, del sacrificio o de la inteligencia honesta para ganar dinero sin ser esclavo ni esclavizar, las cosas no son tan problemáticas, pero quienes han logrado escalar posiciones adquisitivas y de repente caen de nivel, la situación suele ser desesperante. 
Para quienes tenemos un techo bajo de ambiciones, nos conforma ganar el dinero que consideramos primordial para bancar vivir dentro de éste sistema sanguijuelista, para quienes tienen el techo de ambiciones muy altas ni el dinero ni el tiempo son suficientes. 
Para quienes han perdido su trabajo y no consiguen otro, la situación es también desesperante.



En todos los casos, las consecuencias son malas, la gente se siente en un estado de frustración casi perpetua, si tiene no le alcanza, si no tiene, mucho peor.
Será digno el trabajo en la medida de la estatura de nuestras ambiciones, y para bajarlas hay que renunciar a muchas cosas, para lograrlo hay que tener la capacidad de priorizar qué cosas valen más para nosotros. 
Difícil será priorizar para quienes no pueden parar un minuto y salir del pensamiento tradicional y arrollador que justamente...no quiere que pensemos, o en todo caso necesita que pensemos únicamente en la oferta de pensamiento inducida con suma perversidad.

Creo que por allí pasa la receta más lógica si es que deseamos navegar por éste océano de energía llamado vida.
No habrá gobernante ni sistema que nos brinde ese estado de equidad que todos deseamos, lamentablemente vivimos en un mundo que no admite ni permite aislamientos, habrán mejores o peores gobiernos, gobernantes, sistemas, pero todo y absolutamente todo será hecho a la medida de aquél decreto cruel en tiempos de Adán y Eva, inexplicable deidad que expresa su amor fomentando el sufrimiento y que vende anestesias temporales acordes a la evolución de su propio sistema creado.



A quién le sea aplicable yo le deseo un feliz día del trabajador, a quien no, le deseo mucha Gnosis.

Gilgamesh***

jueves, 30 de abril de 2015

* Límites planetarios; Aldo Baeza *

***¿Qué tal amigos?, espero que excelentemente bien.

Ésto de compartir cosas lo pone a uno a veces como un opinador, o un analizador, y sí.., uno analiza para entender, creo, y si no analiza es muy probable que termine formando parte de un número en el raiting de quienes miden cuántos boludos consumen mucha de la porquería que hay en la tele,en la radio, en internet, por citar un ejemplo.
Incluso para mucha gente, éste blog puede resultar boludo o una boludez más, y si analizar parece contraproducente pues entonces yo acepto ser un boludo analizador antes que un boludo número, para trabajarle gratis a quienes viven de los boludos.

Ufff...¿muchas veces boludo no?, mil disculpas, a veces me gusta romper el formato *español neutro* que debo utilizar por respeto a vuestro entendimiento, ya que nuestras lenguas y modismos nos hacen distintos en una hermosa diversidad, siempre y cuando sume y no reste.
Y como lo he hecho en éstos 4 años, no me gusta ser el eje ni el centro de nada, puesto que yo no he inventado nada y lo que soy son mis 51 años de andar por éste planeta aprendiendo, y aprender es conocer a los otros, es decir que, me gusta presentarles reflexiones y opiniones de otras personas cuando las considero *aportantes*

Hoy, Aldo Torres Baeza, en una opinión que puede tener mucho de la mía, pero que ameniza desde la forma y los conceptos propios de su toque individual, y creo que éstas reflexiones de Aldo son ricas desde *su* forma de presentarlas. A ésto le llamo Gnosis y espero que sea un ejemplo de que Gnosis no es aferrarse a un sectarismo o creencia sino a una forma inteligente de interpretar todo lo que nos rodea, incluso, lo que hay dentro de nosotros mismos.

Límites Planetarios, por Aldo Torres Baeza.

La Tierra gira en sí misma, como un trompo taladrando el oscuro telón del infinito. Y mientras gira, va mezclando los componentes físicos, químicos y biológicos exactos para generar la vida, como solo un organismo vivo puede hacerlo. Además, y con idéntica exactitud, equilibra sus balances de temperatura, la composición química en el mar y la biósfera. La Tierra se crea y recrea a cada instante, para que nazca y renazca la vida. La Tierra alberga vida, pero ella misma también lo está: entrega signos de su vitalidad cuando agita sus placas, cuando sacude los circuitos del agua, cuando gira en sí misma o alrededor del Sol. 

También respira : la vegetación inhala de la atmósfera unos 450.000 millones de toneladas de CO2 al año, que luego exhala a través de la fotosíntesis, la quema natural de materia orgánica y otros procesos.
La Tierra está viva, y nos concede las condiciones exactas para que nosotros, los seres humanos, la habitemos. Y dentro de todas las especies que adornar y recrean la vida, a los seres humanos le fue asignada una tarea esencial: organizar los recursos sobre la Tierra. Tenemos una vida a cargo. Todavía mejor: a nosotros nos toca vivir y rehacer continuamente el contrato natural entre Tierra y humanidad pues su cumplimiento garantizará la sostenibilidad del todo.



Al igual como los cuerpos humanos necesitan comer y descansar para vivir bien, la Tierra necesita energía y descanso para seguir funcionando. Sin embargo, apurando sus ritmos y estrujando sus entrañas, nosotros, que debiésemos cuidarla, hemos puesto a este organismo vivo en guerra consigo mismo. Una de las mejores evidencia científicas de este colapso lo encontramos en un informe elaborado por Johan Rockström y otros veintiocho científicos de tres continentes, entre ellos varios premio nobel. El informe =Planetary boundaries= determina nueve indicadores para mantener el equilibrio del ecosistema. De estos, tres ya han sido superados: cambio climático, ciclo del nitrógeno y pérdida de biodiversidad. Lo que indica que ya hemos superado los límites de seguridad recomendados. Tristes datos adornan las páginas del mencionado informe: dice, por ejemplo, que hoy estamos extinguiendo entre 100 a 1.000 veces más biodiversidad que en la era preindustrial, extinguiendo unas 50.000 especies por año.



Hemos estrujado la mitad de las reservas de petróleo que albergaba el planeta. Hemos inventado nuevos materiales como el plástico, y de plástico hemos atestado los mares: solo el Océano Pacífico contiene tal cantidad de residuos plásticos que cubre un área equivalente a dos veces el tamaño de los Estados Unidos. *Cada milla cuadrada de océano contiene un promedio de 46.000 pedazos de plástico flotante*.
En *La venganza de Gaia*, James Lovelock explica como anualmente se lanzan a la atmósfera cerca de 27 mil millones de toneladas de dióxido de carbono. En las últimas tres décadas se ha perdido cerca de la tercera parte de toda la riqueza natural. En las siete décadas trascurridas tras la Segunda Guerra Mundial, se han consumido más recursos planetarios que en toda la historia de la humanidad. Según Global Footprint Network *necesitamos un planeta y medio para abastecer las necesidades de consumo de la humanidad*.



De mantenerse esta paranoia, para el 2050 necesitaríamos tres planetas como éste para generar la vida. Mafalda, con razón, se preguntaba: *¿no sería más progresista preguntar dónde vamos a seguir, en vez de dónde vamos a parar?*. Bastante sensata la duda de Mafalda, porque, a diferencia de otras crisis, ya no se trata de un lugar en el mundo que esté en peligro, de una sociedad o una localidad en particular que podamos abandonar, este es un problema de supervivencia planetaria, por lo que, de seguir así, tendríamos que buscar otro planeta en el universo para generar la vida, ¿será por eso que tiritarán las estrellas, por temor a que algún día las poblemos para llenarlas de humo y cemento?...
En fin, hemos sobre pasado los limites ecológicos del planeta.
El concepto de límites Planetarios se originó al reconocer que la humanidad se ha convertido en la principal fuerza que dirige los cambios sobre la Tierra.



Tanto hemos alterado el equilibrio del planeta, modificando la composición de la biósfera o los mares, por ejemplo, que, según explicó Rockström, *hemos entrado en una nueva era geológica: el Antropoceno*. En la era del Antropoceno, el ser humano se convierte en el principal factor de alteración de los sistemas terrestres.
La pregunta fundamental, explica Rockström, reside en comprender cómo este evidente colapso afecta al desarrollo humano y cómo condiciona nuestra supervivencia. La respuesta *tiene mucho que ver con la resiliencia*, indicó, *se trata de ver las capacidades del Sistema terrestre de autoregularse; de soportar disturbios y mantenerse en un dominio estable*.
Sin embargo, no hemos sido muy resilentes que digamos, nuestra acumulación ilimitada, nuestro despilfarro inconsciente, no puede ser soportado por un planeta limitado, que ya saca la lengua y da evidentes signos de agotamiento.



Entonces surge un problema sistémico: los límites químicos, físicos y ecológicos del planeta Tierra ya no soportan más. Ervil Laszlo lo grafica de la siguiente manera: *Hemos llegado a una línea divisoria en la historia. El mundo que hemos creado ya no es sostenible: o cambia o se destruirá. La pregunta ya no es si habrá un cambio, sino cuándo ocurrirá y a qué precio*.
A pesar de todo, a pasar de todos, la Tierra, este organismo vivo y autopoiético que nos recibe, continua generando las condiciones exactas para generar vida. Está cansada, pero continua girando. A pesar de las 16 millones de hectáreas de bosque que se cortan cada año, los arboles siguen creciendo y regalando sus frutos a cambio de un poco de agua, además de transformarnos el dióxido de carbono en oxigeno, proceso esencial para generar la vida. A pesar de los 6,4 millones de toneladas de residuos que cada año le arrojamos al mar, el mar sigue humedeciendo las costas, transformándose en espejo de la luna y pariendo a las olas, aquellas hijas danzantes que tiene con el viento.



A pesar de los 27 mil millones de toneladas de dióxido de carbono que le arrojamos a los cielos, el aire, como la música y los sueños, sigue corriendo invisible, despeinando las ramas de los árboles, dibujando el rostro de las piedras y tejiendo la ruta del polen. La Tierra se empecina por mantener las condiciones para la vida, de continuar siendo el milagro que es. Einstein decía: *hay dos formas de ver la vida: una es creen que no existen milagros, la otra es creer que todo es un milagro*. La vida en la Tierra es un milagro, milagro olvidado por quienes la habitan.

Si tuviéramos un telescopio gigante, ubicado a 15 millones de años luz de la Tierra, y con ese telescopio miráramos hacia acá, probablemente nos impresionaría que en una esquina del universo, en una de las 100 mil millones de galaxias, en la Vía Láctea, en el sistema solar, ni tan lejos ni tan cerca del sol, en un pequeño grano de arena flotando en un haz de luz, especialmente acondicionado para generar vida, naciera una especie única, con las facultades para imaginar y reimaginar la vida, para inventar y reinventar el futuro, que puede organizarse para vivir y convivir en sociedad.



Si ese telescopio se acercara aún más, vería que todos los habitantes de este grano de arena esparcido en el universo son parte de la misma especie, única hasta lo visto, habitando el mismo puntito de arena, también único, y que cualquier daño que hagan sobre otros, lo hacen sobre sí mismos. Porque todos son Uno. Vería, también, que no hay peligros provenientes del espacio, que no hay armas escondidas en el Sol o la Luna, ni en ningún lado, y que cualquier mal provocado en la Tierra, nacerá de la misma Tierra.

Y si ese telescopio pudiese viajar al pasado, vería que, a lo largo de toda su historia, la Tierra tiende a aniquilar los excesos y alcanzar formas regulares. Incluso los opuestos se equilibran para mantener ese orden primordial. Los seres vivos siguen ese impulso, por eso han logrado adaptarse a las diferentes fases de la Tierra: las primeras bacterias, ayudadas por el proceso de fotosíntesis provocado por los rayos ultravioleta y las tormentas, se transformaron en organismos unicelulares que, luego, fueron generando diferentes modos de vida. Millones de años después, organismos como el elefante, inteligentes y pluricelulares, generaron pieles para amagar la Era del Hielo, y, de esta forma, se transformaron en otro organismo vivo: el bisonte.



Las jirafas alargaron sus cuellos para acceder a los frutos en altura; los conejos se blanquearon para engañar a los zorros; los caballos desarrollaron esas pesuñas para desplazarse con mayor rapidez. Casi todos los organismos vivos han logrado adaptándose a su entorno.
Pero hay un organismo que sigue un camino inverso, que rompe el equilibrio y la tendencia al orden. Es más, ese organismo transforma su medio ambiente natural para desarrollar sus fines. No se adapta, adapta el entorno. Si, ese organismo es el ser humano. Pero no podemos ser pesimistas. Es cierto, el ser humano recorre aquel camino inverso, su adaptación ha sido más compleja en relación a los demás seres vivos que pueblan la Tierra.

Gilgamesh***